Figura revelada
Porque el misterioso hombre al volante del coche robado no era un hombre en absoluto; era un gran muñeco de tamaño humano. Completamente envuelto en ropa gruesa para enmascarar sus rasgos de maniquí. Esto explicaba la inmovilidad del conductor. Pero un maniquí no podría conducir un coche. Pero entonces vio lo siguiente…
Page 33 of 50