Un agente le pidió que abriera el ataúd – Nunca esperó lo que ocurrió a continuación

Carga sorprendente

Sus ojos se posaron en algo que yacía en la parte trasera de la furgoneta. ¿Lo veía bien? ¿O le engañaban sus ojos? Ben tenía la cabeza pegada a la ventanilla. No había duda. Era un ataúd. Esta situación había tomado un giro que él nunca había esperado, pero había más.