Una hija le entrega a su padre su pedido y él le dice algo que la hace echarse a llorar

Empezar feliz

Siempre había mucha gente a la hora de comer en el restaurante de comida rápida donde trabajaba Stacy. El local estaba situado entre un centro comercial y una zona empresarial. Por lo tanto, el restaurante siempre estaba lleno de clientes hambrientos que necesitaban un tentempié rápido a la hora de comer. Por eso Stacy se alegró de operar el drive-thru ese día. Sin cajas registradoras ni niños quejicas, sólo repartiendo bolsas de comida a los conductores. Y cuando oyó la voz de su padre, esa felicidad aumentó.