Una mujer encuentra un coche abandonado en el bosque y palidece al mirar dentro

Instinto

Pero antes de que Diana pudiera siquiera terminar ese pensamiento, su corazón dejó de latir porque la figura del otro lado intentó abrir la puerta. Diana sintió que la niña instintivamente le agarraba la mano por miedo, y la mujer se la apretó suavemente para intentar calmarla. La cerradura las había salvado por ahora…