La intuición nunca se equivoca
Christine admitió en ese mismo instante que supo que Martin era esa persona cuando clavó sus ojos en él. Martin no podía creer esta afirmación. Ya se le estaban formando lágrimas en los ojos mientras ella pronunciaba esas palabras, y trató de mantener la humildad. Pero Christine insistió. “Mi intuición nunca se equivoca”
Page 40 of 50