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Una situación especial

Al tratarse de una especie tan peculiar, los animales no podían ser internados en ningún zoo normal ni en ningún centro de recuperación. Los animales podían enviarse a los laboratorios en los que se criaron inicialmente o llevarse a un número selecto de zoológicos especiales repartidos por todo el país. Pero poco a poco, el número de animales empezó a disminuir.
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